Bloomies nació en octubre de 1992 como el fruto del sueño de dos grandes amigas de toda la vida que con toda su ilusión, su energía y su empuje lograron poner en marcha un proyecto del cual se enamoraron desde la primera conversación.
Maria Pia Zemborain y Maria Victoria Dodds decidieron trascender las barreras del St. Catherines y continuar juntas por el resto de sus vidas. Desde hace casi 28 años recorren ese camino que tal vez estaba marcado pero que sólo sabían transitarlo una al lado de la otra.
Con la ilusión como motor y la amistad como sostén, como brazos en un abrazo, abrían las puertas de una antigua casa sobre Guise, una calle de andar tranquilo, que aún conserva ese tinte de barrio entre tanto edificio.
Identificadas con la idea de que el Jardín de Infantes es un lugar para dejar volar la imaginación decidieron convertir esa vivienda en un espacio donde enseñar, entretener, impulsar y acompañar los sueños de los chicos.
Así nació Bloomies, un lugar mágico, un lugar donde todo es posible y donde lo mejor está por venir.
Pasó el tiempo y la casa quedó chica. El camino estaba trazado. Otra casona de estilo inglés, siempre sobre la calle Guise, las esperaba para seguir adelante y poder así recibir y acompañar a más familias. El sueño de crear algo grande para los más chiquitos seguía creciendo.
Y como de utopías se trata, soplaban catorce velitas cuando aparece en sus vidas otra calle, otro barrio, una nueva sede.
En marzo de 2006 con mucha más experiencia, pero con las mismas ansias de la primera vez, inauguran en la calle Ayacucho el segundo Bloomies, un gran desafío, pero con la impronta de siempre: el amor infinito por su tarea.
Hoy 28 años después, en medio de una situación muy compleja para la Argentina y el mundo entero, vuelven a apostar a un nuevo desafío, esta vez para los más chiquitos, esos bebes a quienes tanto les gusta mimar, abrazar, enseñar, y estimular brindándoles un ambiente propicio y único para que ellos encuentren allí su segunda casa.
Baby Bloomies los espera con gran entusiasmo y bellas propuestas lúdicas rodeadas de amor y alegría.
Seguimos con el compromiso de siempre: mucho amor y responsabilidad para acompañar a nuestros chicos en sus primeros años en un clima de libertad, afecto y de vínculos sinceros.